Se están desmovilizando más guerrilleros con mando y con experiencia. El gobierno debe cuidar que no regresen a la guerra y puede hacer que contribuyan a que el Estado conozca mejor a su organización.
Esta tercera entrega de los Cuadernos del conflicto recoge las presentaciones e intervenciones del seminario internacional Verdad, memoria histórica y medios de comunicación organizado por la Fundación ideas para la Paz en asocio con la Revista Semana y el Centro Internacional para la Justicia Transicional. El documento, como el seminario, recoge experiencias nacionales e internacionales en torno al rol de los medios de comunicación dentro de procesos de justicia transicional. En la primera parte del texto figuran los aportes analíticos sobre casos emblemáticos de la justicia en su forma transicional como la Comisión de Verdad y Reconciliación (CVR) de Suráfrica, el Tribunal Penal Internacional para Ruanda (TPIR), la Comisión de Verdad y Reconciliación de Sierra Leona y la Argentina post dictadura. En la segunda sección se presenta la discusión sobre el caso colombiano alrededor de preguntas como ¿cuáles deberían ser las prácticas periodísticas para cubrir un proceso tan complejo como el de la desmovilización de los grupos paramilitares?; ¿cuáles deben ser las fuentes y los criterios para contextualizar los hechos?; ¿qué cubrimiento merecen las víctimas de estos grupos? y, en últimas, ¿qué implicaciones tendrá para el derecho a la verdad y a la reconstrucción de la memoria histórica el tipo de prácticas y de cubrimiento que los medios de comunicación le están haciendo al proceso y sus actores?
La presente entrega se detiene en los retos y dilemas que encierra la reciente adopción del concepto de reintegración por parte de la administración Uribe en el marco del proceso de desarme, desmovilización y reinserción luego de la implementación de la Ley de Justicia y Paz. Partiendo de la realidad tangible de que en el país existen hoy 43.500 excombatientes de grupos armados el documento analiza los lo que se ha hecho así como algunos desafíos que deberá afrontar el proceso en términos de acabar con el mercado de la guerra, cuándo establecer el límite final del proceso, qué hacer con las comunidades receptoras, el tratamiento diferenciado entre los desmovilizados y finalmente qué hacer si el proceso de reintegración fracasa.
Este documento explica y detalla los deberes del sector empresarial y su participación en la reinserción y reincorporación de combatientes ante un eventual proceso de desmovilización. Y es que Colombia tiene fortalezas que otros países con conflictos armados no tienen: un sector empresarial moderno y relativamente robusto. Para el país las oportunidades para diseñar esquemas de reinserción y recuperación sostenibles en el tiempo son mayores. Sin embargo, se ha encontrado que materializar la colaboración del sector empresarial no es fácil. Se requiere buena coordinación entre las diferentes partes (sector empresarial, agencias del Estado, comunidad internacional, sociedad civil, desmovilizados), atender posibles temores y generar confianza y probablemente otorgar incentivos concretos a las empresas. Por lo tanto este informe pretende dar cuenta de los hallazgos en torno a poder entender a fondo el funcionamiento del Programa de Reinserción a la Vida Civil del Ministerio del Interior y sus esquemas de generación de empleo e idéntica alternativas para la cooperación del sector empresarial en los modelos de reinserción económica. Y así mismo conocer las percepciones del sector empresarial sobre la desmovilización y la reinserción.
Con la concreción de la Mesa de Acercamiento en La Habana, se abre finalmente una fase de diálogo directo entre el gobierno y el ELN luego de los intercambios de propuestas que comenzaron en junio de 2004. ¿Qué se puede esperar? Según la propuesta original del gobierno del 29 de junio de 2005, el propósito central de la Mesa de Acercamiento, será la definición de un cese de hostilidades como compromiso del ELN para facilitar el inicio de un proceso de diálogos. En reciprocidad, el gobierno ofrece suspensión de operaciones militares contra el ELN, sin la exigencia inicial de desarme y desmovilización (ver Boletín 23). ¿Es ese un propósito viable? De acuerdo con el análisis que plantea este boletín, los acercamientos con el ELN no ocurren en un vacío sino que están inscritos en un triángulo en el que mucho depende del comportamiento de las otras dos partes: las autodefensas y las FARC. Dentro de ese triángulo, el ELN tiene hoy una ventana de oportunidad. El documento argumenta también que con la desmovilización de los paramilitares, las condiciones para una negociación de paz satisfactoria -el escenario estratégico- parecen inmejorables, pero la implementación de mecanismos sobre el terreno -el escenario táctico- que permitan avanzar en esa negociación supone retos de inmensa dificultad. La conclusión a la que se llega es que la tarea de La Habana debe ser entonces bosquejar el puente que lleve de un escenario a otro y ponerle un cronograma. Y para eso no basta con discutir un cese de hostilidades.
La Fundación Ideas para la Paz y la Revista Semana, con el apoyo de las Embajadas de Holanda y Suecia y de la Fundación Konrad Adenauer, organizaron esta semana en Medellín el foro "Reconstrucción, Reinserción y Región". El foro estuvo seguido de un taller en el que participaron expertos internacionales del Banco Mundial, del Bonn International Center for Conversion y del PNUD, entre otros, así como representantes del Gobierno Nacional, de los gobiernos departamentales y locales, y miembros de la sociedad civil. A continuación reproducimos unas primeras conclusiones del taller que pretenden arrojar algunas luces sobre el proceso de reinserción en el que se embarcó el país.
La crisis del proceso con los paramilitares se agudizó esta semana con un intercambio de comunicados entre las partes. Dos temas atraviesan la discusión: el incumplimiento del cronograma de desmovilizaciones y la participación de estos grupos en política. Detrás de la crisis hay evidentemente otro tema más, que es el mismo que dio origen al proceso y que ahora, si no se trata con delicadeza y con imaginación, lo puede acabar: el temor a la extradición. A criterio de la Fundación Ideas para la Paz, los tres problemas tienen una misma solución, que es el cumplimiento de unas reglas de juego. En ese sentido, este boletín recoge algunas de las recientes declaraciones de los voceros de las autodefensas en las que insisten en que hay que buscar redefinir reglas de juego, tratar de enderezar el camino devolviendo la confianza a los interlocutores que actúan en la mesa de diálogo y que ha habido improvisaciones y ha tocado inventarse muchas cosas, porque esto no tiene libreto y argumenta que para evitar el naufragio del proceso y a la vez el desdibujamiento de la política en Colombia, hay que aclarar entonces cuáles son las reglas y cómo se verifica su cumplimiento.
Este boletín analiza dos hechos que sacudieron al país la segunda semana de octubre de 2005: el traslado de "Don Berna" de la cárcel de máxima seguridad de Cómbita a la cárcel de Itagüí y el atentado con un carro bomba contra el senador Vargas Lleras. Para la Fundación Ideas para la Paz Ambos casos tienen esto en común: probablemente no son lo que se dijo que fueron. Ni el gobierno tenía la intención de extraditar a Don Berna ni los paramilitares tenían la intención de abortar las desmovilizaciones. No fue esta "la crisis más grave" del proceso, como dijera Ernesto Báez; más bien un tropiezo en un juego de apariencias. Ambos, gobierno y autodefensas, estaban cañando. Por su parte, el atentado contra Vargas Lleras produjo un apresurado consenso sobre la autoría de las FARC, a pesar de que la evidencia hasta ahora es prácticamente inexistente y el análisis no favorece esa tesis. La pregunta retórica que permanece entonces es si la mencionada corresponde a un juego de espejos.
La incursión al municipio de Mutatá y otras acciones recientes de las Farc como la masacre de Puerto Valdivia, arrojan la pregunta: ¿están las Farc retomando territorio? Responderla con precisión requeriría un análisis región por región de la capacidad actual de cada una de las estructuras de las Farc, del dispositivo local de la Fuerza Pública, de los efectos de la desmovilización de los grupos paramilitares y en general de la situación de esos territorios. Sin embargo, este documento plantea que es posible encontrar unas pistas que permitan interpretar los hechos recientes y anticipar algo del futuro sin demasiada especulación, si se atiende a las lógicas estratégicas de la concentración y dispersión de hombres de las Farc y a los objetivos que persiguen con estos movimientos. En ese sentido, el análisis realizado da cuenta de algunas de las manifestaciones concretas de estas estrategias con las cuales las FARC buscan adaptarse a las dinámicas cambiantes del conflicto y posicionarse como la guerrilla más vieja del mundo.
En este boletín se analizan las desmovilizaciones colectivas de los grupos paramilitares durante el 2005 y ante todo la desmovilización del grupo más poderoso -el Bloque Central Bolívar-, las cuales arrojan una pregunta estratégica: ¿se está poniendo fin al ciclo de formación de grupos de seguridad privada en Colombia? Si se analizan los escenarios futuros con base en los indicios de hoy, y no en las lógicas "político-militares" de ayer, es inevitable llegar a una conclusión: habrá una tercera generación de grupos paramilitares.